Los antioxidantes del puerro previenen el cáncer, las enfermedades cardiovasculares y la enfermedad de Alzheimer.
Gracias a los polifenoles, posee propiedades antiinflamatorias que protegen contra la artritis, el asma y las enfermedades cardiovasculares.
La luteína y la zeaxantina protegen los ojos y mejoran la visión.
Contiene fibra, que mejora la digestión y previene el estreñimiento.
Gracias a los oligosacáridos y flavonoides, reduce el colesterol y la presión arterial.
El puerro contiene inulina, que actúa como prebiótico y ayuda a controlar los niveles de azúcar en sangre, previniendo el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.